LONDRES.- Más de 100.000 manifestantes marcharon este sábado por el centro de Londres, portando banderas de Inglaterra y Reino Unido, en una de las mayores protestas ultraderechistas de los tiempos modernos en Gran Bretaña, organizada por el activista antiinmigración Tommy Robinson.
La marcha denominada “Unite the Kingdom” (Unir el Reino) cerró un verano boreal marcado por protestas antimigrantes frente a hoteles británicos donde se alojan solicitantes de asilo, muy compartidas en redes sociales por el militante ultraderechista.
“Cientos de miles de personas abarrotan ya las calles del centro de Londres mientras nos unimos como uno solo por nuestras libertades", dijo Robinson en X mientras veía cómo creía la concurrencia. La marcha reunió a unas 110.000 personas, en tanto la policía de Londres desplegó más de mil agentes.
“La mayoría silenciosa dejará de ser silenciosa”, declaró luego Robinson a la multitud. “Hoy es el inicio de una revolución cultural”, añadió.
Los manifestantes llevaban la bandera del Reino Unido y la roja y blanca de Inglaterra, mientras otros traían banderas estadounidenses e israelíes y llevaban los sombreros MAGA del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien lleva adelante una campaña antiinmigrantes en su país.
Corearon consignas críticas al primer ministro británico, el laborista Keir Starmer, y portaron pancartas contra la inmigración, entre ellas algunas que decían “que se vayan a casa”. Algunos asistentes llevaron a sus hijos chicos.
Nueve personas fueron detenidas por su “comportamiento inaceptable” hacia las fuerzas de seguridad, según informó la Policía Metropolitana de Londres, contra quienes lanzaron “botellas, bengalas y otros proyectiles”.
“Queremos recuperar nuestro país, queremos recuperar nuestra libertad de expresión”, dijo Sandra Mitchell, una simpatizante que asistió a la concentración. “Tienen que detener la inmigración ilegal en este país (…) Creemos en Tommy”, añadió.
“No soy racista, simplemente he constatado la evolución demográfica”, dijo por su parte Ritchie, un manifestante de 28 años llegado desde Bristol con tres amigos, que calificó de “invasión” la llegada de migrantes indocumentados a Gran Bretaña.
Por su parte, Mary Williams llevaba una foto del influencer conservador estadounidense Charlie Kirk, adalid de las juventudes trumpistas, asesinado el miércoles en Estados Unidos. El suceso impactó tanto a la treintañera que decidió salir a manifestar. Tommy Robinson había hablado mucho sobre Charlie Kirk en sus redes sociales.
El mensaje de MuskVarias personalidades de extrema derecha, incluido Steve Bannon, exconsejero del presidente estadounidense Donald Trump, se sumaron a la protesta.
Incluso hubo un discurso sorpresa por video de Elon Musk, quien pidió la “disolución del Parlamento” y la sustitución del gobierno laborista de Starmer. Recordando a Kirk, el multimillonario acusó: “La izquierda es el partido de la violencia y el asesinato”.
La invitación de Robinson a participar, que hablaba de una “revolución patriótica” y un “renacimiento” del pueblo británico, exigía estrictos controles fronterizos y la expulsión de migrantes, y criticaba a Starmer por “inmiscuirse” en el Parlamento y el liderazgo del país, fue retomada por reconocidas figuras de la extrema derecha en Europa y el resto del mundo: desde la ultraderecha francesa, con Eric Zemmour, presidente de Reconquete, hasta la ultraderecha alemana, con Petr Bystron, eurodiputado de AfD, pasando por la comentarista británica Katie Hopkins y el controvertido psicólogo canadiense Jordan Peterson, además de la llamada no programada de Musk.
La organización Stand Up To Racism UK convocó a la misma hora una contramanifestación, de menor afluencia. Diane Abbott, una de las participantes en esa manifestación, defendió ante Sky News que es “muy importante oponerse al fascismo”. “Debemos ser solidarios con los solicitantes de asilo, y mostrar que estamos unidos”, agregó.
Las marchas fueron en gran medida pacíficas, pero hacia el final de la tarde, los partidarios de Unir el Reino lanzaron objetos a la manifestación rival y trataron de romper las barreras establecidas para mantener a los dos grupos separados. Los agentes tuvieron que usar la fuerza para evitar que se rompiera una valla de control de multitudes, dijo la Policía Metropolitana.
Los contramanifestantes abuchearon a un hombre con sangre corriendo por su rostro que era escoltado por policías desde el grupo de seguidores de Robinson. No estaba claro qué le había sucedido.
La multitud más grande se extendía desde el Big Ben a través del río Támesis y más allá de la estación de tren Waterloo, a casi 1 kilómetro. Aunque la multitud era grande, quedó muy por debajo de una de las marchas más grandes recientes cuando una manifestación propalestina atrajo a unas 300.000 personas en noviembre de 2023.
Tommy Robinson, cuyo verdadero nombre es Stephen Yaxley-Lennon, tiene 42 años y fue el fundador de un pequeño grupo llamado Liga de Defensa Inglesa, que nació en el seno del movimiento ‘hooligan’.
Conocido por sus posiciones antiinmigración y antiislam, ha sido condenado varias veces, sobre todo por alteración del orden público. En 2018 fue encarcelado por desacato al tribunal, y en 2024 por haber reiterado unas declaraciones difamatorias sobre una persona refugiada.
El mayor partido político británico contra la inmigración, Reform UK, que ha encabezado las encuestas de opinión en los últimos meses, ha mantenido sin embargo las distancias con Robinson.
Agencias AFP, AP y Reuters