Una infernal jornada de verano se espera para la capital rionegrina y gran parte de Río Negro, con temperaturas que rondarán los 40 grados centígrados.
El pronóstico obligó a las autoridades provinciales a suspender el dictado de clases, que se reiniciaría mañana normalmente.
Desde Salud en tanto se advirtió que "las situaciones de excesivo calor pueden causar síntomas de agotamiento o calambres que requieren estar hidratados continuamente y suprimir todo tipo de actividad".
Y recomendaron que "en caso de agravarse los síntomas consultar en un centro de salud más cercano".
Se sugirió evitar salir a la calle en las horas más calurosas del día, reducir el esfuerzo cuando esté haciendo mucho calor, si es inevitable salir, permanecer de ser posible a la sombra, cubrir la cabeza con un sombrero o gorro y vestir con ropa ligera de colores claros y cerrar persianas y cortinas de las ventanas expuestas al sol.
Se sugirió también beber bastante agua y con frecuencia aunque no se sienta sed, ingerir alimentos livianos con frecuencia, ducharse frecuentemente durante el día, evitar el alcohol, las bebidas con cafeína o muy azucaradas y las comidas calientes, consumir preferentemente frutas y verdura y no abusar de la sal y las grasas, permanecer durante el mayor tiempo posible dentro de la casa o en la oficina, en el lugar más fresco, asegurarse que la heladera esté en buen estado de funcionamiento para la conservación de alimentos y bebidas.
En caso de descompensaciones se recomendó pedir ayuda a un pariente, vecino o compañero de trabajo si siente malestar por el calor. En el caso de los mayores de 65 años deben extremar las precauciones y mantener contacto con alguien cercano al menos dos veces a día.
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