La memoria es una función esencial del cerebro que nos permite almacenar, procesar y recuperar información, y su buen funcionamiento resulta clave para el bienestar emocional y cognitivo. En este contexto, cada vez surgen más alternativas naturales para incorporar a la rutina diaria y así mejorarla. Una de ellas es una planta oriental milenaria, reconocida por sus propiedades para fortalecer el cerebro y mejorar la memoria, la cual ya ganó mucho protagonismo por sus beneficios comprobados.
Se trata del ginkgo biloba, una planta milenaria con más de 2000 años de historia en la medicina tradicional asiática. Considerada una de las especies más antiguas del mundo, logró consolidarse como una de las más estudiadas por la ciencia moderna debido a sus propiedades para mejorar la memoria y optimizar las funciones cognitivas. Originario de Asia, su uso se extendió a nivel global, tanto por sus beneficios terapéuticos como por su valor ornamental. Además, se destaca en tratamientos destinados a mejorar la circulación sanguínea y prevenir el deterioro cognitivo.
Según dio a conocer el sitio especializado CuídatePlus, el ginkgo biloba se destaca por su eficacia en el tratamiento de trastornos como la demencia y en la mejora del flujo sanguíneo cerebral. Asimismo, investigaciones recientes respaldan que esta planta favorece la circulación en el cerebro, lo que garantiza un aporte constante de oxígeno y nutrientes esenciales para las células cerebrales. Además, este mecanismo resulta clave para conservar las capacidades cognitivas, especialmente en adultos mayores, quienes suelen experimentar un deterioro progresivo de la memoria, la concentración y el razonamiento con el paso del tiempo.
Esta planta es una de las más reconocidas en la medicina tradicional asiática, valorada por su capacidad para aumentar la vitalidad mental y favorecer el flujo sanguíneo, especialmente en el sistema nervioso central, según explicó Carmen Rubio, doctora en Farmacia y profesora titular de Toxicología de la Universidad de La Laguna (Tenerife). También, se le atribuyen efectos positivos sobre el sistema cardiovascular y propiedades antioxidantes. Cabe destacar que estas acciones se deben a tres tipos de compuestos presentes en sus hojas: los flavonoides, con alto poder antioxidante, los ginkgólidos y los bilobálidos, que forman parte de los terpenos, un amplio grupo de compuestos orgánicos con importantes efectos biológicos.
A lo largo de la historia, las hojas de esta planta se utilizaron frente a múltiples patologías, especialmente en la medicina tradicional china. Entre los beneficios más destacados se encuentra su uso para la prevención y tratamiento del deterioro cognitivo leve asociado a la edad, una indicación autorizada por la Agencia Europea del Medicamento (EMA). Sin embargo, aunque tradicionalmente se le atribuyen muchos otros efectos, no existe suficiente evidencia científica que respalde su eficacia en todas las condiciones para las que se emplea.
Los beneficios del ginkgo biloba para la memoriaEstos son algunos de los problemas de salud para los que se utiliza tradicionalmente las hojas de ginkgo biloba:
AnsiedadMejora de diversas funciones mentales: memoria, velocidad de pensamiento, atenciónProblemas de visión en personas con diabetesSíndrome premenstrualEsquizofreniaDisfunción sexualAstenia primaveralAsmaDependencia de la cocaínaHipertensión arterialEsclerosis múltipleEnfermedades cardíacasDislexiaFibromialgiaCánceres como colorrectal, de estómago, de ovario y de páncreasHemorroidesMigrañasSíndrome de Raynaud (trastorno de los vasos sanguíneos)Conjuntivitis alérgica estacionalAccidentes cerebrovasculares (ictus)Colesterol altoArteriosclerosisCómo consumir el ginkgo bilobaEl ginkgo biloba puede consumirse en diferentes formas: comprimidos, extractos líquidos, geles o infusiones elaboradas con sus hojas desecadas, que suelen combinarse con té u otras plantas. Esta versatilidad facilita su incorporación a la rutina diaria, según las necesidades y preferencias de cada persona.
Sin embargo, es importante evitar el consumo de sus semillas, ya que, aunque en ocasiones son utilizadas en la medicina tradicional china y en la gastronomía, pueden resultar tóxicas y provocar problemas respiratorios y arritmias, según advirtió el experto Galán de Mera. Por ende, ante cualquier duda o antes de iniciar su consumo, se recomienda consultar siempre con un médico para evaluar su conveniencia en cada caso particular.