El documental , Billy Joel: And So It Goes ha dado mucho que hablar durante los últimos días. Si bien no hay declaraciones explosivas de los entrevistados, el trabajo producido por Tom Hanks que está dedicado al pianista y estrella del pop y el rock es sometido a diversos análisis que encuentran y subrayan los comentarios del músico y de su entorno.
Uno de los capítulos que en los últimos días se ha puesto bajo la lupa es la relación de Billy Joel con otro pianista y cantautor de fama mundial, Elton John. A lo largo de una década y media ambos compartieron una infinidad de conciertos. Billy y Elton tocaron por primera vez sobre el mismo escenario en una gira conjunta que llamaron Face 2 Face. El primer concierto se realizó el 8 de julio de 1994, en el Veterans Stadium de Filadelfia, Pensilvania, con capacidad para 62.000 personas. Ese concierto dio inicio a un tour de 21 shows con entradas agotadas en 13 ciudades y estableció un formato que se repitió en las siguientes juntadas. Entre marzo y abril de 1995, la gira Face 2 Face regresó con doce conciertos adicionales en algunos de los estadios más grandes de los Estados Unidos. Tres años después, la gira conquistó los Estados Unidos y se trasladó a Europa, Japón y Australia, con un total de 30 actuaciones. También el nuevo siglo volvió a reunirlos, cuando celebraron un tour, en 2003, de más de dos docenas de actuaciones, que incluyeron momentos solistas, de dúo, y de cada uno con su banda, hasta llegar a los bises, en los que interpretaron temas propios y clásicos de otros compositores.
En la serie dedicada al pianista norteamericano se ve como Joel habla del tiempo en que intentaban compararlo con Elton John y de la admiración que le tiene a su par inglés. Sin embargo, en la segunda parte del nuevo documental, el cantante de “New York State of Mind” recordó cómo los comentarios públicos de John sobre su necesaria rehabilitación afectaron la amistad entre ambos.
“Elton dijo que creía que yo necesitaba rehabilitación de verdad”, cuenta Joel en el documental, haciendo referencia a una entrevista que concedió a la revista Rolling Stone en 2011. “Lo atribuyó a: ‘Oh, es un borracho’. Y eso me dolió mucho”. En la primera parte de la película, Joel admite que en sus comienzos, en la década del 70, le “molestaban” las comparaciones con el inglés e intentaba por todos los medios distanciarse de su estilo compositivo -que siempre admiró-, pero con el tiempo trascendió todas las habladurías y finalmente terminaron actuando juntos en el escenario.
Según el portal People, John declaró a la revista Rolling Stone que habían tenido “muchísimas giras canceladas por enfermedades y otras cosas, incluyendo el alcoholismo” tras su gira conjunta de 2010. En el film, John dice sobre Joel: “Me va a odiar por esto, pero cada vez que fue a rehabilitación, han sido superficiales. Te quiero, Billy, y esto es amor con mano dura”.
En 2005, Joel ingresó en rehabilitación en el Centro Betty Ford después de que su entonces esposa, Katie Lee, le diera un ultimátum. La pareja se divorció en 2009. Tras la rehabilitación, el cantante de “Piano Man” se tomó un descanso de los escenarios y dejó de hacer giras. En el documental, Joel describe los comentarios de Elton John como algo que lo hizo sentir “destrozado” y señaló que había tocado fondo. “Estaba desilusionado con lo que creía que significaba todo esto”, dijo. Era como si todas las señales me indicaran: ¡Basta! Y escribí una carta a la banda: “No quiero seguir con esto. Voy a parar”.
Mientras el documental cosecha elogios en el mundo, Joel se recupera de los trastornos cerebrales que sufrió durante los últimos meses, que lo obligaron a cancelar todos los conciertos que tenía previsto dar hasta finales de este año.
En mayo pasado había tenido que suspender sus actuaciones por una acumulación de líquido en el cerebro que había afectado su audición, su visión y el equilibrio. La condición se llama hidrocefalia de presión normal, “un trastorno cerebral que puede afectar las habilidades relacionadas con el cerebro, incluyendo el pensamiento y la concentración, la memoria, el movimiento y más”, según la explicación de especialistas.
Joel, por su parte describió el síntoma: “Mi equilibrio es terrible. Es como estar en un barco... Sé que mucha gente está preocupada por mi salud, pero estoy bien. Lo que tengo es algo que muy pocas personas conocen, incluyéndome a mí, sin importar cuánto intentes investigarlo. Estoy haciendo lo mejor que puedo para lidiar con ello y recuperarme”.