“Romper paradigmas”. Así definió Gustavo “Paco” Manríquez, CEO de Banco Supervielle, esta nueva era en el Capítulo 6 de “Empresas en Acción”, que organizó La Nación. Junto a Diego Marín, CEO de Mercedes-Benz Compañía Financiera, y Fernando Storchi, CEO de Megatlón, recorrieron los temas más importantes que tienen que ver con el liderazgo y la transformación de los negocios en tiempos digitales, en un panel moderado por José Del Rio, secretario general de Redacción del medio.
“Rompimos el paradigma. Escuchamos al cliente sobe que la cuenta remunerada era algo que le atraía, así que lo implementamos. Y después rompimos un paradigma de que todos los bancos teníamos nuestra propia tienda de e-commerce, y donde realmente creo que hay un líder indiscutido, por lo que llevamos la tienda de Mercado Libre dentro de nuestra app”, contó Manríquez sobre los cambios que encaró la compañía en los últimos tiempos. “Estamos yendo a un concepto de una súper app, donde brindemos cosas de la vida cotidiana al cliente”, resumió.
La industria financiera, en la que opera Supervielle, es una de las que más se está transformando, especialmente por el ingreso de “nuevos jugadores” que desafían a las empresas que llevan más tiempo en el sector. “Creo que lo que más cambió es la inmediatez y cómo la industria financiera está presente en la vida cotidiana del individuo”, dijo Manríquez. “Y ahí es donde entran en juego las experiencias. Los grandes ganadores seremos los que mejores experiencias le brindemos a los clientes”, auguró.
Para ello, señaló que es clave romper con la inercia cultural. “Hay que crear un clima, obviamente de exigencia, pero que favorezca que se innove, que se divierta, que hagamos cosas que realmente tengan impacto y que sorprendan al cliente. Yo creo que la innovación no es solamente nueva tecnología, es tecnología aplicada e impacto y sorpresa”, dijo.
Diego Marín, CEO de Mercedes-Benz Compañía Financiera, contó que en la industria automotriz, específicamente en la de camiones, lo nuevo en la Argentina tiene que ver con la expansión del leasing. “El leasing se utiliza mucho en el mundo, pero acá tal vez no era tan popular. Ahora ha ido ganando terreno porque tiene ventajas impositivas y no inmoviliza tanto capital. Apostamos mucho, lo sabemos hacer y es lo que más fuerte se va a venir”, comentó.
Marín también dijo que eso debe ir acompañado de procesos de créditos más simples. “Es importante que los clientes puedan acceder fácilmente. Tenemos una plataforma donde suben algunos datos y reciben una respuesta rápida”, contó.
En cuanto al futuro del país y de su industria, Marín, como los otros líderes, se mostró optimista. “Este año el mercado de camiones viene muy bien, creo que va a terminar siendo un año récord. El porcentaje de camiones financiados debería aumentar, porque en el mundo se compra casi todo con crédito y acá todavía no tanto, por lo que creo que tenemos bastantes oportunidades por delante”, afirmó.
Por último, Marín reconoció que en la Argentina todavía falta bastante para la consolidación de los vehículos pesados eléctricos. “Todavía los eléctricos son más caros que los de combustión. Y acá tenemos una flota bastante vieja. Antes de ir al eléctrico se debería intentar transformar esos vehículos muy viejos y que contaminan mucho por tecnologías a combustión que contaminan muy poco”, concluyó.
Por su parte, Storchi, de Megatlón, explicó cómo la empresa logró, en sus comienzos, romper con la estacionalidad típica que tenían (y sufrían) los gimnasios a partir de la Red de Clubes. Pero hoy los desafíos son otros. “El gran desafío es hacer amigable la actividad física. Más del 50% de la población argentina no la realiza y el 60% tiene sobrepeso. Hay mucho para trabajar. Tenemos que trabajar en introducir esos hábitos saludables”, dijo.
Una de las formas de lograrlo es creando “comunidad”. “El tema de comunidad es fundamental, más en una ciudad como Buenos Aires, donde el 30% de los hogares es unipersonal. Detectamos, por ejemplo, que los domingos la actividad crece muchísimo, porque es un lugar de encuentro social. Y las clases grupales generan mucha comunidad, son como pequeñas tribus donde se da una dinámica muy particular que genera mucha retención”, contó, y añadió que hoy los jóvenes y adolescentes se están acercando en buen número a los gimnasios.