Camaleón, el pasado no cambia: todos los detalles de la miniserie que reúne a Pablo Echarri con la China Suárez

Jornada 28. Edificio Volta. ciudad de Buenos Aires. Sabrina Correa (La China Suárez) entra a la galería de arte. En silencio y sin detener su marcha, lo mira de reojo. “Me genera una enorme satisfacción poder concretar esta retrospectiva en mi país…”, le dice Salvador Carvallo (Pablo Echarri) a una ronda de extras que simulan ser periodistas. “¡Corten! Vamos una más”, grita la directora por tercera vez, buscando la perfección en una toma que hace rato parece resuelta. Es que esta escena corresponde a una secuencia decisiva del primer episodio de Camaleón: el pasado no cambia, miniserie que desde este miércoles está disponible en Disney+. “Es una escena muy clave en la historia. Es el segundo encuentro entre Sabrina y Salvador”, le explican sus protagonistas a LA NACIÓN en un parate del rodaje.

Ante el pedido de la directora, la China vuelve a salir del emblemático edificio porteño, donde se topará con algunos transeúntes que la reconocen de inmediato. “¿Puede ser una foto, China?”, le dice un hombre que inmediatamente saca su celular para retratar el casual encuentro. “Es una locación complicada”, se queja alguien de producción mientras la actriz accede cordialmente a cada pedido o saludo de la gente que transita la Av. Roque Sáenz Peña por esas horas de la mañana.

En el interior de la locación, Echarri aprovecha estos minutos para repasar la letra y darle indicaciones a una actriz sobre cómo pararse ante la cámara. También, intercambiará algunas opiniones sobre la situación actual del país que, por ese entonces, estaba gobernado por Alberto Fernández. Es que la filmación de esta serie -a cargo de Kapow- ocurrió en 2023 y duró alrededor de nueve semanas. Sin embargo, tardó casi dos años en llegar a la pantalla.

Cuando el pasado está de regreso

Dirigido por Natalia Garagiola y coescrito por Marcela Guerty y Pamela Rementería, este drama psicológico se centra en la historia de Sabrina, una periodista de investigación que lleva una vida estable junto a su hija y su marido (Esteban Pérez). Sin embargo, su mundo colapsa con la reaparición de Salvador, un famoso artista plástico que reabre capítulos oscuros de su vida que creía olvidados.

“Salvador es amigo de su madre (Cecilia Dopazo) y el padre de su mejor amiga de la adolescencia (Sofía Palomino). Mi personaje tuvo una relación con él cuando era menor de edad; algo que ella vivió como un romance pero con los años se da cuenta que fue abuso. Es una historia un poco fuerte y a la vez muy actual. Algo de lo que se está hablando mucho en los medios, gracias a Dios”, dice Suárez, quien -a lo largo de seis capítulos de 30 minutos cada uno- luchará por exponer la verdad, incluso aún “cuando nadie esté dispuesto a escucharla”.

“Este pintor reconocido en todo el mundo viene, de alguna forma, a intentar ser profeta en su tierra, a seducir al público de su país y se reencuentra con Sabrina”, relata, por su parte, Echarri que sorprenderá con uno de los papeles más oscuros de su carrera. “A mí me da placer colocarme en el papel de un personaje cuestionado porque también es la forma de poder hablar de ciertos temas que de otra manera sería imposible. Siento que mi oficio tiene valor. Más allá de ser una herramienta para el entretenimiento, uno es un eslabón para poder colocar frente a los ojos de la gente un tema así. A veces cuando la bajada la da una línea periodística o te lo cuenta alguien es difícil dar el mensaje pero, cuando lo hace una ficción el público lo toma sin barreras y el impacto es doble”, reflexiona el actor orgulloso de, a través de su trabajo, abrir el debate sobre ciertos temas.

Lo compacto de la historia, el universo de personajes acotados e interpretar a este manipulador y abusador fue lo que hizo que Echarri no dude ni un segundo en protagonizar este proyecto. “Son todos personajes jugadísimos. No me había tocado contar un personaje con estas características y entendía que era un riesgo. En lo personal, ya con 55 años, los riesgos son casi lo único que me mueve la aguja. He podido encarnar a algunos personajes que se parecían unos a otros y que formaron parte de mi camino artístico pero cada vez que aparecían estos personajes que rompían el molde y generalmente van para el lado de lo oscuro, en lo personal me generan un atractivo muy grande”, confiesa el galán de telenovelas que, en este caso, también recurrió a su poder de seducción y carisma para manipular a sus víctimas. “Poner esta voz de seductor no es mucho más de lo que hago siempre. La historia te engaña y después viene el cachetazo y eso es genial”, agrega.

“Es querible, vos lo ves de afuera y decís ‘este tipo es un divino, encantador’, que es lo que pasa en la vida real”, interrumpe la China. La historia, el género, y la mirada de una mujer a la hora de dirigirla fue lo que más sedujo a la actriz cuando recibió esta propuesta. “Para mí es muy importante la mirada de una mujer en esta historia. La delicadeza que tiene ella (en referencia a Natalia Garagiola), cómo va a filmar las escenas de sexo entre estos dos personajes para que no sea una cosa de morbo. Nos gustó mucho la cabeza de Natalia cuando nos contó cómo pensaba encarar estas escenas”, advierte la rubia que suele guiarse por su intuición a la hora de aceptar un proyecto.

“No soy de dudar mucho, me manejo bastante por la intuición y la primera impresión. No pregunto mucho. A veces la he cagado por eso también”, bromea mientras asegura que cuando le contaron quiénes serían parte del elenco ya no tuvo dudas. “Me hablaron de Pablo, de Federico D’ Elía y era cada vez mejor. Además, era difícil decirle que no a una plataforma como Disney+ donde sabes que estás cuidado”, se sincera.

Además de lo atractivo de la trama, hay una fuerte expectativa por ver a esta dupla en pantalla: es que es la primera vez que Suárez y Echarri comparten un proyecto. “Poder conocerla a la China y cruzar estos mundos que no se habían cruzado hasta ahora me generaba una gran expectativa”, revela el marido de Nancy Dupláa mientras la exCasi Ángeles coincide en lo gratificante que es trabajar con el actor de Resistiré, novela que miraba cuando era chica.

Un gran regreso y una revelación inesperada

Cecilia Dopazo (Iris), Federico D’Elía (Jorge), Sofía Palomino (Diana), Esteban Pérez (Franco), Ornella D’Elía (Delfina), Analía Couceyro (Javiera), Delfina Fernández Kubar (Nina), Daniela Pal (Celina), Inda Verónica Lavalle (Dolly) y Pablo Caramelo (Alejo) son los otros nombres que forman parte de este elenco compacto. “Yo, que ya tengo muchos años en esto y he producido, valoro cuando una historia no deambula por distintas ramas o historias paralelas que te quitan el foco. Acá los personajes cuentan sus historias personales pero están muy al servicio de lo que sucede en la historia de Sabrina y Salvador. Entonces eso obliga al espectador a no correrse ni dispersarse”, anticipa Echarri.

Tanto el personaje de Cecilia Dopazo (que hace de madre de Sabrina) como de Sofía Palomino (que interpreta a la hija de Salvador) son claves en esta historia. Mientras que Iris es la musa de este artista y quien, sin saberlo, sirve de trampolín para que este abusador se acerque a su hija, Diana es la encargada de desenmascarar a su padre públicamente.

“Mi personaje fue muy manipulado por este artista que tiene una personalidad tan encantadora y soberbia a la vez. La relación que tuvo con ella fue un tiro por elevación para llegar a Sabrina y esto es algo que ella nunca quiso ver. Siempre lo consideró un amigo genuino, es el que la puso en la cima, allá arriba cuando ella era joven y empapelaba las paredes de los museos pero, sin saberlo, está como sirviendo al plan de Salvador”, reflexiona Dopazo mientras culpa a su inmadurez por no ver lo que sucedía con su hija de 16 años.

Por su parte, Palomino reconoce que su papel también es víctima de su padre, algo que la hizo empatizar muchísimo de entrada. “Empaticé en su fragilidad. Diana no puede callarse. Intenta negar la situación pero una vez que se entera ya no hay vuelta atrás. Su cuerpo mismo colapsa a través de la droga, el alcohol, el llanto, el grito, la depresión”, revela. Sin embargo, como todos los personajes, esta fotógrafa que viaja por el mundo también tiene sus luces y sombras. “Me interesaba mucho trabajar la zona de la ternura, su torpeza. Esto de ponerse contenta al reencontrarse con su amiga que hace mucho no ve. Cosas que quizá no están a priori en el guion y me ayudaron a entender el lado luminoso del personaje”, agrega la actriz que, sin dudas, es una gran revelación en este proyecto.

Camaleón no sólo le dio la responsabilidad de encarnar un personaje así de fuerte sino de debutar en el mundo de las plataformas, algo muy nuevo para la hija de Juan Palomino y Adriana Ferrer. “Nunca había trabajado en una serie de esta envergadura, así que para mí era un desafío enorme. Además, trabajar con los compañeros con los que trabajé fue un aprendizaje absoluto”, asegura esta actriz de 35 años que escribe, dirige y actúa.

Inmediatamente, Dopazo coincide en este punto y resalta lo que significó para ella hacer de madre de la China Suárez. “Fue muy lindo trabajar con ella, es súper profesional. Me gusto mucho conocerla”, confiesa mientras agradece los halagos por lo parecidas que se ven en pantalla. Si bien con Echarri son contemporáneos y compartieron un proyecto como fue Papeles en el viento, la realidad es que esta es la primera vez que comparten el set. “Con Pablo nos habíamos cruzado en alguna situación social, por eso me resultó más familiar, pero tampoco habíamos compartido escenas antes. Es muy cálido, creo que es perfecto para este personaje; lo encarnó muy bien. Bueno, tampoco le queda muy lejos esto de ser seductor”, agrega con una sonrisa pícara.

El pintor secreto

Además del gran elenco, los cuadros son los grandes protagonistas de esta historia. De hecho, son esas pinturas y bocetos los que ayudan en cierta forma a revelar la verdad y desenmascarar a este abusador de menores. Quien está detrás de ellos es un artista plástico que realizó esta obra especialmente para esta serie. “Lo que hizo fue pintar el cuerpo de otra mujer y a mí me pidieron fotos. Creo que, a partir de esas fotos, armó mi cara en todos esos cuerpos”, cuenta Cecilia que, como musa de Salvador, su imagen está en la mayoría de sus creaciones.

“Está bueno que se puedan llegar a estos niveles de producción y que haya espalda suficiente como para poder contratar a un artista que produzca esta obra original que ha generado. Por cuestiones de derechos es imposible usufructuar obras de arte de otros artistas sin un acuerdo concreto y esta historia necesitaba su arte particular y personal. Realmente es una obra extraordinaria y él un encanto”, advierte Echarri.

La inversión, la calidad de trabajo y el respaldo que ofrecen hoy en día estas plataformas también es destacado por todos los actores que integran este proyecto; especialmente en un momento donde la ficción en la TV abierta escasea. “Estas plataformas que nos dan la posibilidad de zambullirnos en historias con un gran apoyo. Además, el paradigma de grabación y exhibición ha cambiado en los últimos tiempos. Yo soy hijo de televisión de aire y es una forma completamente diferente de trabajar. Se acerca mucho a una manera cinematográfica desde la creación de los personajes hasta la manera de filmar”, revela el actor de Montecristo.

El hecho de que sea un proyecto respaldado por Disney también fue fundamental para que Dopazo acepte ser parte de esta historia; de hecho Camaleón es su vuelta a la ficción después de varios años dedicada al teatro. “Hay una producción interesante detrás de los libros que me encantó. Escribiendo hay personas que sueñan cosas, sueñan con las acciones, sueñan con los lugares, sueñan con el vestuario de cada personaje que sirve para contar su historia y eso no siempre se puede llevar a cabo. Con una plataforma así tenés garantizado que se puede volar y que eso que leíste en el papel se puede llevar a cabo de una manera artística y técnica buenísima. De hecho, es con lo que me encontré cuando vi los capítulos”, concluye la actriz encantada con el resultado final.



Fuente: https://www.lanacion.com.ar/espectaculos/series-de-tv/camaleon-el-pasado-no-cambia-todos-los-detalles-de-la-miniserie-que-reune-a-pablo-echarri-con-la-nid16042025/

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