El crédito en dólares aumentó en abril. Luego de que el Gobierno levantara el cepo cambiario para los ahorristas minoristas, a mediados del mes pasado, los argentinos usaron más la tarjeta de crédito para hacer pagos en moneda extranjera: el saldo financiado alcanzó los US$744 millones, un aumento del 19,4% frente al mes anterior.
En comparación, al cierre del mismo mes del año anterior el saldo había llegado a los US$421 millones, de acuerdo con un relevamiento que hizo First Capital Group con base en datos del Banco Central (BCRA). Se trata de un crecimiento interanual del 76,7%, aunque en los últimos 12 años el comportamiento mensual fue irregular, ya que alternó entre alzas y bajas.
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La liberación de las restricciones cambiarias facilita el uso de la tarjeta fuera de la Argentina para comprar en dólares e hizo crecer este rubro, según explicó el informe. Vale la aclaración: todavía rige el 30% a cuenta de Ganancias para las compras en dólares, lo que encarece el dólar oficial ($1150, en Banco Nación) hasta los $1495. La manera de esquivarlo es cancelar la deuda en moneda extranjera con dólares propios, antes de la fecha del vencimiento del resumen bancario.
Los préstamos en dólares también subieron un 1,8% mensual y el saldo llegó a US$14.577 millones para el total acumulado. El crecimiento interanual fue del 149,6%, contra los US$5839 millones al cierre de abril del año pasado. El 76,2% de esa deuda es por líneas de préstamos comerciales, que subieron 0,2% mensual y 168,3% en 12 meses.
A finales de febrero, el Banco Central hizo otro guiño para ir hacia una competencia de monedas dentro de la Argentina y amplió la posibilidad para que los bancos locales usen sus propios dólares y puedan canalizarlos para financiar a sus clientes, asumiendo el riesgo de un descalce de monedas (es decir, prestarle moneda extranjera a quienes no lo generan). La prohibición venía de febrero de 2016 y era una queja de ciertos bancos, mientras que muchos otros mantenían la postura firme de que no tenía que cambiarse, para así evitar riesgos en el sistema financiero.
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Los préstamos en pesos no frenanLos préstamos en pesos tampoco paran de crecer. El año pasado los bancos dejaron de mirar al Estado y se dieron vuelta para empezar a financiar a sus clientes, lo que provocó una fuerte expansión del crédito en todas sus líneas. El saldo total de préstamos en pesos al sector privado alcanzó los $68,9 billones en abril, un 66,6% más que en marzo y un crecimiento del 218,3% interanual.
Esto también significó el revivir de los préstamos hipotecarios y es una de las líneas más demandadas, a pesar de que en los últimos meses los bancos subieron la tasa de interés. En abril acumuló un saldo de $3 billones, lo que representó un incremento del 14,9% frente al mes anterior. El crecimiento interanual fue del 407,2%, contra los $589 millones al cierre de abril del año anterior.
“Esta línea se mantiene muy dinámica a pesar del incremento del IPC del mes de marzo, que quebró una tendencia descendente de la misma y puede generar inquietud entre los solicitantes de operaciones ajustables por UVA. Estas operaciones se preparan entre 30 y 90 días antes del otorgamiento efectivo, por lo que durante abril se plasmaron operaciones cuyos demandantes que no esperaban este rebrote, veremos en sucesivos meses, si esta situación genera una pausa en el ritmo de las colocaciones“, dijo Guillermo Barbero, socio de First Capital Group.
La línea de créditos prendarios no se quedó atrás. En abril acumuló un saldo de $4,3 billones, lo que representó una suba nominal del 11,5% mensual y del 285% en un año. De acuerdo con Barbero, fue un mes de “franca recuperación” para esta línea de préstamos, con un gran otorgamiento de operaciones sobre maquinarias agrícolas.
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En el caso de los préstamos personales, acumularon un saldo de $14,8 billones, un incremento del 8,3% mensual. Subieron 424,6% en comparación con el año pasado, incluso a pesar de que la tasa ronda el 70% interanual, casi el doble de la inflación proyectada para este año.
Al observar las operaciones con tarjeta de crédito en pesos, estas tuvieron una suba nominal del 7,1% mensual y el saldo llegó a los $81,7 billones. Mientras que en comparación con el año anterior, treparon 158,6%. Con el avance de las promociones en cuotas y las temporadas de gastos previo al invierno, el analista proyecta que en el segundo trimestre se mantendrá la tendencia positiva.
El Gobierno anuncio la Fase 3 del plan economico y el fin del cepo cambiario“El dinamismo observado en el consumo con tarjetas de crédito en pesos refleja el impacto de la inflación sobre los patrones de gasto, incentivando el uso de cuotas con y sin interés como mecanismo de financiamiento. No obstante, cabe destacar que este rubro viene creciendo a un ritmo menor que los préstamos personales, tendencia que ha llevado a ambos instrumentos de crédito a alcanzar niveles equivalentes en términos de volumen operado", explicó.
Por último, los préstamos comerciales subieron 3,5% mensual nominal y llegaron a los $24 billones en el total acumulado. Fue un crecimiento del 176,6% frente al año anterior. “Si bien este rubro aporta el mayor volumen nominal a la recuperación del crédito, es una de las que menos ha crecido relativamente, evidenciando cautela del sector productivo y comercial a la hora de concretar nuevos financiamientos de las entidades financieras”, cerró Barbero.