Varios estados liderados por gobernadores republicanos implementan medidas para prohibir la validez de licencias de conducir para inmigrantes ilegales que son emitidas en otras jurisdicciones. Esta tendencia está encabezada por Florida, seguida por Wyoming y, pronto, por Tennessee, mientras que otros consideran sumarse. Estas políticas se oponen a las de 19 administraciones estatales y Washington D. C., que otorgan documentos sin exigir pruebas de residencia legal.
Florida inauguró la restricción en las licencias de conducir para indocumentados en su territorioTras promulgarse en 2023 la ley impulsada por el gobernador Ron DeSantis, Florida se convirtió en el primer estado que tipificó como delito menor, sujeto a multa y posible arresto, conducir con licencias “emitidas exclusivamente a indocumentados” o marcadas por la falta de prueba de presencia legal.
El Departamento de Seguridad Vial floridense validó la medida contra dos modelos concretos: las “drive‑only” de Connecticut y las tarjetas diferenciadas de Delaware. Mientras el primero entregó cerca de 60.700 documentos de ese tipo, el segundo no divulgó cifras oficiales, según explicaron desde Associated Press.
Wyoming y Tennessee: otros estados que no aceptan licencias de conducir de indocumentadosEn 2024, Wyoming sancionó una norma semejante que bloquea la validez de licencias procedentes de estados “santuario” para conductores sin papeles. Poco después, la Legislatura de Tennessee aprobó un texto casi calcado que el gobernador Bill Lee adelantó que rubricará.
El análisis de AP, basado en el software Plural, reveló que al menos media docena de estados con mayoría republicana evaluaron este tipo de proyectos para anular licencias otorgadas a indocumentados por otras jurisdicciones.
Alabama: el senador Chris Elliott logró la media sanción de un texto que, según explicó, busca que “quien esté en el estado ilegalmente dé la vuelta y se marche”. La demócrata Linda Coleman‑Madison agregó una enmienda que obligaría a colocar la advertencia en los letreros de bienvenida.Montana y New Hampshire: sus respectivas Cámaras bajas aprobaron iniciativas con objetivos análogos y esperan definición en el Senado.Dakota del Norte, Oklahoma y Carolina del Sur: legisladores presentaron borradores que aún no pasaron comisiones, pero que replican el patrón restrictivo.Licencias diferenciadas vs. Real ID: diferenciasLa pugna estatal se desarrolla en paralelo a la implementación federal del Real ID, sistema que el 7 de mayo exigirá estos documentos actualizados para que puedan ser usados para ingresar a instalaciones federales o abordar vuelos domésticos.
Aunque la ley nacional estableció requisitos uniformes de seguridad, permite que cada estado emita credenciales alternativas a quienes no presentan esa documentación, siempre que superen exámenes teóricos, prácticos y de visión.
Connecticut y Delaware optaron por distinguir sus licencias para indocumentados con marcas visibles.Otros 17 estados concedieron documentos sin señalización exterior: a simple vista, no es posible saber si el portador carece de estatus migratorio o simplemente eligió no solicitar la Real ID.Especialistas como Kathleen Campbell Walker, abogada de inmigración en El Paso, interpretan el fenómeno como parte de la “creciente intervención de los estados en cuestiones de aplicación federal”.
En Florida, organizaciones de trabajadores agrícolas no registraron casos de sanciones, pero alertaron sobre la tensión. “Algunos compañeros se desplazaron hasta estados permisivos para obtener licencia y poder conducir aquí. La ley los dejó en el limbo”, apuntó Jeannie Economos, de la Farmworker Association.
En California, donde las autoridades entregaron documentos a personas sin estatus, el ambiente de persecución intensificó la ansiedad. “Incluso quienes poseen licencias válidas en California temieron salir de la región”, afirmó el abogado angelino Robert Perkins.